Capitulo 16

Jake abre la puerta y allí esta ella, su princesa, preciosa como siempre.

Sin dejarla articular palabra la besa con pasión como si el mundo se acabara mañana, sin dejar de besarla la lleva hasta su cuarto.

Ha llenado el suelo de velas, quiere que sea especial, es su primera vez.

El vestido de Patt se desliza por su espalda lentamente y la camiseta de Jake desaparece en cuestión de segundos. Sin dejar de besarla la tumba en la cama y su ropa acaba de desaparecer.

-Tengo miedo-

-No te preocupes princesa, todo ira bien-

-Pero…-

La calla con un beso y le dice

-Cierra los ojos y déjate llevar, ¿Confías en mi?-

-Hasta con los ojos cerrados-

-Pues confía y todo ira bien-

Sus dedos se deslizan por todo su cuerpo, besándola a cada paso que da.

Y mientas las velas se consumen sus cuerpos pasan a ser solo uno.

Capitulo 15

Me siento ahogada, muerta, soy un puñetero fantasma vagando por mi casa.

¿Qué narices te pasa Laura?, ¿Quieres hacer el favor de reaccionar de una vez?

Si como engordo, si no como engordo, si como me odio a mi misma, si adelgazo estoy enferma.

¿Qué representa que tengo que hacer?

Noches en vela, cicatrices por todo mi cuerpo, para evitar volver a caer.

Lagrimas vacías en mi almohada, paginas en blanco de un diario que nunca puedo empezar.

Me duele todo mi cuerpo, cada día me pincha más el corazón.

Necesito escapar de Mia, encima Patt es la única que lo sabe y se ha ido dando un portazo de casa.

Normal… debería habérselo contado, pero toda la historia con Jake me esta matando.

Cuando sientes que la vida se desvanece, que no te quedan razones para luchar, que todo lo que te rodea te da asco. Te miras en el espejo y tu reflejo te asusta,  lágrimas negras y vacías, caídas desde lo más interno de tu corazón.

Todos te miran con cara de ‘’Eres una foca’’ y tu solo haces que auto convencerte de ello, no puedes ir de compras todo te queda pequeño, no puedes mirarte en los escaparates, estás más gorda que los maniquíes.

Me asusta la idea de pensar que la mano de Patt ya no va a estar ahí para evitar que vuelva con Mia.

Odio comer pasteles y helados, si los como recurro a Mia con el ultimo trozo en la boca.

Me asusta la idea de encerrarme en el baño, pongo la música a todo volumen para que nadie escuche mis arcadas, pero aun así me sigue asustando.

Capitulo 14

Creo que he sido demasiado dura con Laura, no se merece que este tan borde, pero Mia me supera.

Solo hace que amargarle la vida. Joder! Quiero que se sienta como lo que es, mi princesa, pero con Mia de por medio es imposible.

Tengo que acabar con Mia, me pondré en contacto con especialistas o lo haré yo misma.

Pero Mia tiene que salir de la vida de Laura!

Tengo que hablar con Laura, pero aún no, sigo enfadada. No soporto que me oculte las cosas, si somos hermanas lo somos para todo.  

Lleva días muy rara por whatsapp y no me cuenta nada, solo hablo yo. Al final me cansare de soltar discursos, porque como era de esperar le hablo de Jake, de mi felicidad y su bipolidaridad que hace que pase de feliz a triste en décimas de segundo.

Encontrar el sobre ha sido la gota que ha colmado el vaso. Pero Laura llevaba esa camiseta, la que se pone para sentirse delgada, esa que se pone cuando Mia esta presente, encima hoy estaba blanca, parecía un fantasma andando por su casa.

Y al oir la palabra helado ha desaparecido, creo que se ha encerrado en el baño a ver a Mia otra vez.

Odio a Mia con todas mis fuerzas!

Capitulo 13

13 que numero tan perfecto, a algunos les da mala suerte, pero para Patt y Jake era demasiado  perfecto,  todo empezó un día 13 y desde entonces cada 13 ha sido mejor que el anterior.

Aunque tenga 4 años menos que yo voy a luchar por él. Él me ha salvado de mi pozo sin fondo y cada minuto que paso a su lado soy mucho más feliz.

¿Por qué todo es tan complicado?

Ojala tuviéramos la misma edad, todo seria más fácil, Jake no tendría miedo y no tendríamos que ocultarnos.

Jake consigue que se me ponga la piel de gallina con solo una mirada, sus preciosos ojos azules me hipnotizan y consigue calmarme con una caricia.

Entre sus brazos me siento segura y sé que nada ni nadie me hará daño jamás.

Desde que nos dimos nuestro primer beso han habido muchísimos más, pero lo que realmente fue especial fue nuestra primera vez.

Aunque la edad siempre ha sido un problema siempre ha habido cariño y dulzura en cada beso, en cada caricia, en cada mirada.

Algún día te atreverás a decirme que soy algo más que una simple princesa de cristal, que solo soy tuya, lo dices con los ojos pero tu boca no se atreve.

Miedo, sabio miedo, pero no hará que detenga mi lucha ni un solo segundo.